Trabajo remoto: ¿Un paso adelante o atrás en la Igualdad de Género?

Trabajo remoto: ¿Un paso adelante o atrás en la Igualdad de Género?

El trabajo remoto ha transformado la dinámica laboral, generando debate sobre su impacto en la igualdad de género. Mientras algunos argumentan que ofrece flexibilidad y oportunidades, otros señalan que puede perpetuar roles tradicionales y desigualdades. Este cambio plantea interrogantes sobre su verdadero efecto en la equidad de género en el ámbito profesional.

El trabajo remoto o Home Office (HO) puede haber cambiado definitivamente nuestra manera de trabajar. 

A muchas mujeres les resulta atractiva esta idea, especialmente aquellas que tenían trabajos a tiempo parcial debido a las responsabilidades tradicionalmente asociadas a su género. Con esta modalidad, podrían aprovechar al máximo su jornada laboral y volver a enfocarse en sus metas profesionales que alguna vez quedaron en segundo plano.

Después de tener hijos, muchas madres han tenido la oportunidad de continuar trabajando desde casa. Investigaciones revelan que la flexibilidad les permite mantener sus empleos y seguir en ocupaciones exigentes pero bien pagadas, a pesar de las demandas familiares.

Hay muchos estudios sobre los desafíos que enfrentan las personas que buscan progresar tanto personal como profesionalmente en su carrera laboral.

Según estos estudios, el trabajo flexible podría generar más problemas al llevar a una mayor carga laboral y doméstica para los empleados.

En las investigaciones se descubrió que las mujeres suelen encargarse de más tareas del hogar al trabajar de manera flexible, mientras que los hombres tienden a enfocarse en ampliar sus responsabilidades laborales.

En una investigación, se descubrió que los hombres que trabajan en oficinas y tienen o no tienen hijos, y las mujeres que trabajan en oficinas y no tienen hijos, tienden a trabajar más tiempo sin que les paguen extra, sobre todo cuando tienen más libertad para decidir sus horarios. Sin embargo, las mujeres que trabajan en oficinas y tienen hijos no siguen esta tendencia.

Otra faceta a considerar en relación al impacto del teletrabajo en las oportunidades de desarrollo profesional según el género es observar la presencia y participación de las mujeres en puestos de toma de decisiones.

Durante periodos anteriores, era difícil encontrar un lugar en ciertas mesas dominadas por hombres. ¿Podría el trabajo remoto empeorar esta desigualdad al limitar las oportunidades de establecer conexiones en persona? 

¿Cómo pueden las empresas evitar que el trabajo desde casa perjudique la igualdad de género?

En primer lugar, es importante evitar seguir haciendo lo mismo solo porque parece lo más lógico. En lugar de hacer suposiciones, es fundamental examinar nuevos datos con detenimiento. Al evaluar los perfiles que permiten la inclusión del personal operativo, es esencial plantear preguntas que aseguren que se les brinda las mismas oportunidades de desarrollo profesional en sus carreras laborales.

La cultura organizacional es fundamental. Su impacto en la implementación del trabajo remoto es significativo. ¿De qué manera influye la cultura en la adopción de esta modalidad de trabajo?

Se pueden observar patrones, pero la cultura empresarial es esencial para lograr cambios duraderos. Si bien todos han logrado adaptarse a lo virtual, no garantiza que se pueda mantener una cultura de trabajo remoto a largo plazo de manera efectiva.

 Desafiar los prejuicios es fundamental para los líderes y la gestión de recursos humanos. Es importante reconocer que a menudo funcionan automáticamente, por lo que confrontarlos abiertamente puede ser beneficioso.

Cuestionar las ideas convencionales sobre las responsabilidades de género de mamás y papás para cambiar la percepción del trabajo remoto de hombres y mujeres en el ámbito laboral. Es sorprendente que todavía se mencionen las profesiones como masculinas o femeninas, lo que lleva a pensar que el Home Office es más adecuado para mujeres que para hombres.

Evitar la división entre los que trabajan en la oficina y los que están en casa es importante. La oficina no debe ser privilegiada sobre quienes trabajan a distancia.

Es innato para las personas tratar de sobresalir en el entorno laboral, especialmente cuando hay dinero en juego. Lograr que la colaboración sea efectiva y demostrar el impacto real en los resultados será un desafío para los líderes. Por lo tanto, el departamento de recursos humanos debe estar listo para ayudar a garantizar que esto se logre.

En todas las situaciones, incluyendo esta, es importante que las organizaciones planifiquen la distribución de género tanto en el hogar como en la oficina menos concurrida. Esto implica brindar la misma cantidad de flexibilidad y acceso para todos, sin dejar nada al azar.

Los líderes son fundamentales para impulsar cambios, deben prestar atención a cómo se relacionan con su equipo en persona y en entornos virtuales. Es importante que estén preparados para abordar desafíos como el cansancio, la presión laboral, la conciliación entre trabajo y vida personal, además de comprender la importancia de la diversidad e inclusión. Formas de ofrecer retroalimentación regular en entornos virtuales, monitorear las emociones de su equipo y establecer límites claros entre la vida personal y el trabajo.